El nuevo
Ayer llegó uno nuevo a la oficina, a la espera de destino.
No tiene PC, algo curioso para una consultoría tecnológica, ¿no? Le han dado un manual sobre como documentar, una libreta y un bolígrafo. Lo han aparcado en una mesa con una silla rota que se baja sola.
Esto debe ser una prueba que le hacen a los nuevos, a ver su aguante.
El día de ayer lo llevó bastante bien, prácticamente todo el rato en su sitio sin moverse, mirando todo el día el manual. Hoy ya se está tomando ciertas confianzas, ha pasado del manual y se ha puesto a leer el diario.
Como todavía no ha hablado (ni siquiera hola o adiós) le llamamos “El nuevo”. A lo mejor es mudo ¿quién sabe?
Aprovechando que se ha ido a fumar, Manolo, otro compañero, me ha enseñado lo que ha estado haciendo “El nuevo” durante dos horas. Ha llenado un hoja dibujando una tela de araña. “Vamos a morir! Han contratado a un psicópata para que acabe con nosotros!” Me decía Manolo asustado. Le hemos escondido el boli para que no pueda usarlo con nosotros como si fuera un puñal.
2 comentarios:
"Hola soy el nuevo. Me llamo Pablo y no os hablo porque todavía no me han presentado a los compañeros. A mí, mi madre me enseñó que no hablara con desconocidos".
C..o, poner también algo de vuestra parte.
Tienes razón. Somos unos maleducados. Supongo que ya nos hemos cansado del "ritual de presentación", total, para que nos vamos a molestar en conocer a alguien que no va ha estar más de dos días (afortunadamente) en la oficina.
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